En la actualidad se ha localizado el gen transmisor en el
cromosoma 4.P 16.3 (brazo corto del cromosoma 4).
La expectativa de vida y el coeficiente intelectual de las
personas con acondroplasia son los mismos que los de las personas de talla
normal, a pesar de que los niños con este problema suelen tener un
desenvolvimiento motor lento cuando son bebés, a causa de las proporciones de
su cuerpo. Hay una serie de problemas derivados de la acondroplasia, a lo largo
de la vida, como otitis frecuentes, problemas con la columna, torcedura de
piernas, apneas en ocasiones, etc, pero la calidad de vida de los niños puede
mejorar con un seguimiento médico adecuado.
Desde un punto de vista social, las personas con
acondroplasia conviven siempre con una serie de problemas debidos a la
existencia en nuestra sociedad de clichés y prejuicios culturales e históricos
que aún persisten hoy en día. Un halo cómico o farandulesco rodea a las
personas acondroplásicas, que puede ser doloroso y traer consigo problemas
vitales muy serios para todas ellas.

No hay comentarios:
Publicar un comentario